Baltasar Merino, um botânico nas florestas da Galiza

Baltasar Merino (1845 - 1917)

Natural de Lerma (província de Burgos, Espanha), o sacerdote jesuíta Baltasar Merino passou uma grande parte da sua vida na Galiza, onde desenvolveu um intenso labor em diversos campos científicos. Ingressou na Companhia de Jesus aos quinze anos de idade. Ao terminar seus estudos de filosofia, foi enviado à Havana, onde ensinou retórica durante três anos. Morou mais tarde em Baltimore (Maryland, Estados Unidos), onde estudou teologia. Após a ordenação, foi destinado ao seminário de Porto Rico, mas seus problemas de saúde impediram-no de seguir a viver na região antilhana. Foi então transferido para um colégio da vila da Guarda (provincia de Pontevedra), onde residiria até sua morte. Lá dedicou-se a ensinar química, física, meteorologia e botânica. Nestas duas últimas disciplinas científicas realizou importantes contributos como pesquisador.

 

Uma página da Flora descriptiva e ilustrada de Galicia, de Baltasar Merino

Merino é lembrado principalmente por suas pesquisas no campo da botânica. Durante anos percorreu sistematicamente o território galego para identificar e classificar numerosas espécies vegetais, muitas das quais foram catalogadas pela primeira vez por ele nesta zona geográfica. Entre 1905 e 1909 foi editada em três volumes sua obra mais importante, Flora descriptiva e ilustrada de Galicia. O Real Jardim Botânico de Madrid publicou uma edição digital íntegra desse extenso trabalho. A mesma instituição recuperou outros estudos de Merino sobre a flora galega: Algunas plantas raras que crecen espontáneamente en las cercanías de La Guardia (1895), Contribución a la flora de Galicia (1897-1904) e Adiciones a la flora de Galicia (1917).
 

Floresta da Devesa da Rogueira (Foto: Descubrelugo.com)

Entre os méritos científicos de Baltasar Merino figura o fato de ter sido o primeiro pesquisador que resaltou o excecional valor da floresta da Devesa da Rogueira, na Serra do Courel, hoje considerada como um dos mais importantes santuários da biodiversidade da Galiza. Neste espaço de apenas duzentas hectares de extensão, nas abas do monte Formigueiros (de 1.643 metros de altura), convivem centenas de espécies vegetais, entre as quais há muitas variedades que raro se encontram no noroeste da Península Ibérica. Merino descreveu-a como «aquela

 selva que, contando séculos de vida, conservava como novas as galas da sua primeira idade». Em 2010, a Universidade de Santiago de Compostela criou nas cercanias desta floresta a Estação Científica do Courel. Surpreendentemente, apesar de seu caráter único, o governo autônomo da Galiza nunca mostrou nenhum interesse pela conservação e proteção deste espaço natural.

Baltasar Merino, un botánico en los bosques de Galicia

Baltasar Merino (1845 - 1917)

Natural de Lerma (provincia de Burgos, España), el sacerdote jesuita Baltasar Merino pasó una gran parte de su vida en Galicia, donde desarrolló una intensa labor en diversos campos científicos. Ingresó en la Compañía de Jesús a los quince años. Al terminar sus estudios de filosofía, fue enviado a La Habana, donde enseñó retórica durante tres años. Vivió después en Baltimore (Maryland, Estados Unidos), donde estudió teología. Tras su ordenación fue destinado al seminario de Puerto Rico, pero sus problemas de salud le impidieron seguir viviendo en la región antillana. Fue trasladado entonces a un colegio de la villa de A Guarda (provincia de Pontevedra), donde residiría hasta su muerte. Allí se dedicó a enseñar química, física, meteorología y botánica. En estas dos últimas disciplinas científicas realizó importantes contribuciones como investigador.

 

Una página de la Flora descriptiva e ilustrada de Galicia, de Baltasar Merino

Merino es recordado principalmente por sus investigaciones en el campo de la botánica. Durante años recorrió sistemáticamente el territorio gallego para identificar y clasificar numerosas especies vegetales, muchas de las cuales fueron catalogadas por primera vez por él en esta zona geográfica. Entre 1905 y 1909 fue editada en tres volúmenes su obra más importante, Flora descriptiva e ilustrada de Galicia. El Real Jardín Botánico de Madrid ha publicado una edición digital íntegra de este extenso trabajo. La misma institución recuperó otros estudios de Merino sobre la flora gallega: Algunas plantas raras que crecen espontáneamente en las cercanías de La Guardia (1895), Contribución a la flora de Galicia (1897-1904) y Adiciones a la flora de Galicia (1917).
 

Devesa da Rogueira (Foto: Descubrelugo.com)

Entre los méritos científicos de Baltasar Merino figura el hecho de haber sido el primer investigador que puso de manifiesto el excepcional valor del bosque de la Devesa da Rogueira, en la Sierra del Courel, hoy considerado como uno de los más importantes santuarios de la biodiversidad de Galicia. En este espacio de solo doscientas hectáreas de extensión, en las faldas del monte Formigueiros (de 1.643 metros de altura), conviven centenares de especies vegetales, entre las que figuran muchas variedades que rara vez se encuentran en el noroeste de la Península Ibérica. Merino la describió como «aquella selva que, contando siglos de vida, conservaba como nuevas las galas de su primera edad». En 2010, la Universidad de Santiago de Compostela creó en las cercanías de este bosque la Estación Científica del Courel. Sorprendentemente, pese a su carácter único, el gobierno autónomo de Galicia nunca ha mostrado el menor interés por la conservación y protección de este espacio natural.